Para sacarnos la mufa: lo que dejó el 5 a 2

Da cosa entrar al blog y ver en primera plana la goleada sufrida contra Machete en el último amistoso. Más ahora que estamos punteros por primera vez en nuestra historia porque nos dieron por ganado el partido de la 1º fecha ante el Globo, así que vamos a tratar de hacer una nota con lo que nos quedó colgado de la goleada de la última fecha:
Llegamos a 5!: en la goleada por 5 a 2 frente a El Negro por primera vez en su historia Bien Igual llega a los 5 goles. 4 habíamos hecho en 8 oportunidades (la última en el último nocturno, justamente ante el mismo rival).

Volvió el Patu: el mediático volante reapareció en BIFC luego de 6 meses. Su último partido había sido el 20 de septiembre, aquella mañana de los penales frente a Paseo Tablado donde erró el decisivo. Luego de eso decidió no jugar el Nocturno por estar mal anímicamente.
En su vuelta llegó a los 25’ de comenzado el partido (“tuve que llevar a una mina hasta la casa” fue la excusa que puso), entró en el segundo tiempo y no mostró mucho, solo algunos pases intrascendentes, un par de barridas a los pies de algún contrario y varias pelotas no trabadas. Lo más destacado fueron sus flamantes botines blancos, dignos de cualquier número 10 con clase…

La cábala de Kiko: en el entretiempo Kiko decidió no ir hasta el baño, si no que realizó sus necesidades a un costado de la cancha. Y mal no le fue: metió 2 goles, provocó un penal, y lo más importante: no salió lesionado!. Jugó su mejor partido por lejos desde que está en BIFC. Ahora tendrá que repetir la cábala en todos los partidos….

La lesión del Chaka: al momento de comenzar el partido había solo 8 jugadores de BIFC presentes en la cancha (de 20 anotados), por lo que el Chaka se calzó los guantes y decidió probar suerte… Error imperdonable, ya que solo aguantó 20’ en cancha. En una pelota que se va afuera quiere darse vuelta para buscarla y solito se traba en el barro y se vuelve a torcer la rodilla… Ya no hay dudas ni vuelta atrás: ruptura de ligamentos.
En ese momentos justo llegaba tranquilamente y sin ningún apuro Kiko, así que se realiza el cambio. El destino quiso que este fuera el partido consagratorio del veterano delantero, autor de dos goles (el segundo un golón), siendo el héroe del domingo, vitoreado y casi llevado en andas. Nadie se acordó que llegó 30’ tarde y que por el BIFC casi juega todo un tiempo con 1 menos.
En los festejos nadie recordó tampoco al pobre arquero que malogró su físico por BIFC. El 1 se retiró rengueando en soledad y en silencio bajo la lluvia… Así de injusto es el fútbol a veces, como la vida misma…